lunes, 28 de junio de 2010

¿ EXISTE EL AMOR VERDADERO ?





La mayoría de nosotras desea que los hombres con los que nos relacionamos nos amen y quieran tal como somos. El deseo de nuestros corazones es dar y recibir el amor del ser amado, incluso si éste discrepa con lo que hacemos o decimos. Sin dudas sería maravilloso tener este tipo de relación con la gente , pero para lograrlo cometemos el error más común: no nos comportamos como somos.

Llegar al amor perfecto podría ser posible, siempre y cuando logremos tener esta relación con nosotras mismas, antes de comenzar a construir algo.
Una de las razones por las que a muchas de las mujeres les resulta difícil amar, es porque previamente no se aman a sí mismas. Es duro reconocer que somos imperfectas, y aceptar además que esa imperfección se evidencie ante quien nos ama.

La verdad es que la perfección no existe para nadie, y que el amor que alguien pueda sentir por nosotras ya nos hace perfectas, aún con todos nuestros errores. Sabiendo esto, es muy probable no sólo que nos amen más, sino que también comencemos nosotras a amar genuinamente a los demás, con todos sus errores.

Aquí están las tres formas de tener un mayor amor por nosotras mismas:

1. Escuche sus palabras y sus pensamientos. ¿Por qué razón? Porque ellos determinarán sus acciones.

Una de las cosas que más ayuda a escuchar los propios pensamientos es escribir un diario. No es necesario que usted también lo haga, pero sí que registre varias de sus reflexiones. En vez de usar un cuaderno grande, puede utilizar un pequeño anotador, que puede guardar en su monedero o bolsillo, para tener un acceso fácil en el momento en que sus pensamientos surjan (de hecho, si no anota inmediatamente sus ideas y reflexiones, le será difícil recordarlas más adelante, o por lo menos con el mismo grado de claridad).


Pero cualquiera sea el método, lo importante es que usted anote sus pensamientos, para saber qué desea su corazón.

2. Sea honesta con usted misma y preste atención a todas sus acciones. Las acciones hablan más que las palabras, y siempre dicen la verdad.

¿Qué dicen sus acciones sobre usted? ¿Si usted dice que ama su trabajo , pero sus acciones dicen lo contrario (llega tarde, se enoja con sus compañeros, etc.), ¿cuál cree que es la verdad, sus palabras o sus acciones?

Por otra parte, si usted dice que no es buena en cierto trabajo, pero sus acciones dicen otra cosa… ¿Cuál es la verdad?

Usted puede utilizar esta metodología para cosas mucho más trascendentes en su vida. Siendo honesta con usted misma, o basándose en sus acciones, podrá saber la verdad sobre sus deseos y objetivos.

3. Tómese un tiempo durante el día para escuchar su voz interna. Aléjese de todo el ruido que hay alrededor suyo, y enfóquese profundamente dentro de usted misma. La respiración profunda durante un tiempo prolongado le ayudará a esto.

lunes, 21 de junio de 2010

REFLEXION SOBRE LA MUJER



Anecdonet escribió " Sobre cómo es una gran mujer.


Mujer: cinco letras llenas de amor, de fe, de ternura, de paciencia, de constancia, de coraje, de virtud, son ellas dignas siempre de admirarlas por su gran amor que llevan en su corazón y lo dan a su familia, a su pareja, a sus hijos, no hay como describir todo lo que representa esa palabra llamada mujer, son toda una virtud de amor como lo fue María, Madre Santísima de Jesús de Nazaret, y con que amor de madre se entregó a su hijo, lo acompañó hasta sus últimos momentos en su morada por ese gran amor bíblico ejemplo que hay en la historia, de ahí que la mujer se puede decir que es el más bello regalo que Dios creó en la tierra.
La Mujer es el más querido ser, adorarla es un placer y un deber, madre; la primera mujer que conocí, única, abnegada, sin apariencia, jamás se puede sustituir ella es todo amor, pasión, frenesí, cruz y pilar de mi existencia ella tiene el poder de procrear siempre la tenemos que amar, la vida sin ella no existiera Obra de Dios en su presencia en la tierra.
Misteriosa, orgullosa, imponente, sentimental, siempre se ha de demostrar valiente, grande es su pasión al amor, razón, tiene de exigir cariño, amor, ternura, respeto, no obstante también sabe sufrir, dulce son sus labios al besar, esperanza y vida de a su pecho al niño, que grande es la mujer un panal de miel inagotable, embrujo de ternura y placer.

Tentadora como flor en su vergel, envidiada cual manzana madura, negando el tener que envejecer esperando a su príncipe encantado o simplemente cumpliendo su deber, soñando con nostalgia en su pasado, pero vive el ahora con mucho amor y mucha fé, no en vano Dios, el pensar en la creación la pensó en femenino, la mujer es la base de la tradición en las sociedades, en la calma, en la agitación, el reposo en las luchas, la Virgen es la sencillez, la madre la ternura en ella Dios, dignificó a la mujer en dimensiones insospechadas, que grande es la mujer en todas sus facetas de la vida.
Eres Mujer madre que te conviertes en seno del ser humano con la alegría y los dolores de parto, lo hacen en una experiencia única la cual te hace sonrisa, de Dios para el niño que viene a la luz y te hace guía de sus primeros pasos que damos en la vida, nos apoya en nuestro crecimiento, punto de referencia en nuestro posterior camino de la vida.
Eres Mujer esposa, que unes irrevocablemente tu destino al de un hombre, mediante una bella relación de armonía, de fé, de confianza, de respeto, de amor es una unión reciproca al servicio de la comunicación y de la vida.

Eres Mujer hija y mujer hermana que aportas al núcleo familiar y también al conjunto de la vida social, las riquezas de tu sensibilidad, intuición, generosidad y constancia.
Igualmente eres Mujer trabajadora que participas en todos los ámbitos de la vida social, económica, cultural, artística y política mediante la indispensable aportación que des a la elaboración de una cultura capaz de concebir, razón y sentimiento a una concepción de la vida siempre abierta al sentido del misterio, a la edificación de estructuras económicas y políticas más rica de la humanidad.
Eres una gran mujer por el hecho mismo de ser mujer con la intuición propia de tu feminidad enriqueces la comprensión del mundo y contribuyes a la plena verdad de las relaciones humanas, todo esto es lo que alberga la mujer, es el más bello regalo que Dios nos dio, por una mujer damos la vida, por una mujer vencemos todos los obstáculos que se nos presentan en el camino, por una mujer nos ilusionamos, por una mujer soñamos, por una mujer nos entregamos en una intimidad con la pareja a quien uno ama y le entregamos todo nuestro amor a ella, por una mujer realizamos todas las pruebas que se nos presentan, por una mujer luchamos contra la envidia y chismes mal intencionados que dicen las personas sean mujer o hombres y tratan de destruir una relación de amor y de pareja por esa mujer a quien uno ama, lucha y aclara todas esas mentiras mal intencionadas que dicen para destruir la confianza, el respeto, el amor de la pareja, por ese gran amor que uno tiene a esa bella mujer y junto a ella lograr apartar de sus caminos a esas clases de personas porque la verdad siempre está con las personas buenas de corazón y el Señor Bendito ve en los corazones de las personas la verdad, por eso siempre los guía, los bendice a esas buenas personas y es factor fundamental en la relación de pareja que esa gran mujer le tenga plena confianza a su pareja y siempre tengan buena comunicación para aclarar todo mal entendido, la mujer es todo , en una relación de pareja que nos hacemos por ella, por una mujer reímos, lloramos, pero que bello es tener uno a nuestro lado a una gran mujer, ella es nuestro pilar, nuestra fuerza, nuestra inspiración, nuestro todo; sin una mujer uno no le ve colores a la vida , a ellas se les acaricia con palabras, con cariño, con ternura, con mucho amor, ¡Dios te bendiga Mujer por ser así!, y estar siempre al lado de uno en todas las circunstancias, gracias bella mujer por ser así, son únicas en su proceder no hay dos.

lunes, 14 de junio de 2010

DIVORCIO ENFERMEDAD DEL SIGLO XXI




Cada día, vemos con mayor tristeza y frecuencia, que las parejas jóvenes deciden: separarse, o darse una tregua para finalmente terminar cada quien por su lado.

Desafortunadamente los jóvenes de hoy en día se casan con la mentalidad de que sea por un tiempo determinado y no con la plena conciencia de que un matrimonio debe ser para toda la vida como en los tiempos de nuestros tatarabuelos, bisabuelos e incluso de nuestros padres.

El que el matrimonio sea una institución para toda la vida ha dejado de funcionar, ya que los hombres de ahora desean seguir teniendo su libertad, para irse con los amigos, tomar hasta emborracharse, son irresponsables en cuanto a proveer lo necesario para el hogar o bien muchos de ellos no pueden cortarse el cordón umbilical en relación a los padres, pues prevalece la obediencia a estos antes que darle el lugar que le corresponde a su mujer.
En lo que respecta a las mujeres, desean realizarse profesionalmente, ya sea como ejecutivas, vendedoras estrellas, abogadas brillantes, etc, y no les agrada la idea de destacar como expertas en cocina, ni como eficientes limpiadoras de baños, ahora sus expectativas son trabajar fuera del hogar y ganar dinero, incluso aún más que el marido.

Por esto los divorcios se están convirtiendo en una plaga ya que los jóvenes no desean luchar por conservar la familia, y mucho menos hacerse 100 % responsables de la misma.

Lo lamentable en esto, es cuando los hijos están de por medio, ya que al decidir separarse los padres los únicos que terminan perjudicados son los pequeños.

Todo el amor que existía en aquella pareja, se transforma en odio, rencor y en querer vencer, al ahora enemigo, transformándose todo en una verdadera batalla campal, de la cuál debe de quedar un ganador.

Los hijos, llegan a sufrir considerables trastornos emocionales que deben de ser atendidos por un profesional que los ayude a salir del dolor que les provoca el ya no ver juntos a papá y mamá, incluso cuando llevan a cabo sesiones psicológicas y se les pide dibujar a su familia, se manifiestan los cambios; mamá e hijo son dibujados en la misma casa mientras que el progenitor aparece alejado del hogar y en otros casos ni siquiera aparece en el mismo.

Lo anterior nos demuestra que el niño siente muy a su manera, la ausencia ya permanente de cualquiera de los padres dentro de la casa que antes habitaban todos.

Situación muy dolorosa de manejar, ya que el cariño de los niños para con sus progenitores no puede cambiar de un día para otro.

Por otro lado, las madres se aprovechan de estar protegidas por la ley, y utilizan a esta para no permitirle al padre establecer ningún tipo de contacto con el menor, ya que automáticamente cuenta con la patria potestad de su hijo.

En cuanto al padre, este se encarga de presionar a la madre con la pensión económica a entregar mensualmente, realmente resultan cantidades irrisorias las que se establecen para la manutención del hijo, debiendo ser estas depositadas en el juzgado de lo familiar, sin olvidar que para con la madre no tiene ningún tipo de responsabilidad.

Por tanto, el asunto se llega a convertir en una subasta, ya que si el marido desea estar más tiempo con su hijo, tendrá la obligación de depositar una mayor cantidad de dinero, a más dinero más tiempo, menos dinero se traduce en menos tiempo.

Finalmente, después de las juntas de avenencia, en las que no se llegó a ningún arreglo, llega el día marcado para estampar las firmas en el acta de divorcio y ahora sí; cada cual por su lado, nuevamente a gozar de su libertad, pero ¿realmente la encontrarán?

Con el paso del tiempo los niños deberán acostumbrarse a convivir con el novio de mamá, con la novia de papá, con los hijos del novio o de la novia, a estar un fin de semana con papá, otro con mamá, duele realmente decir que se convierten en pelotitas que van de un lado a otro.

Ahora bien, la nueva generación al vivir la época de los divorcios, no cuenta con bases sólidas para formar y hacer duradero un matrimonio ya que los cónyuges se convierten en un artículo desechable de cuarto y hasta de quinto uso.

Resulta impresionante darse cuenta de la cantidad de divorcios actualmente, cada día es más común escuchar que fulanita, que mi amiga, mi hermana, la tía e incluso uno mismo puede estar atravesando por esta etapa de separación, la cuál en un momento determinado llega a convertirse en una etapa de duelo para ambas partes, pues aunque se desee ansiosamente el divorcio, no deja de ser un fracaso moral, emocional y sentimental.

Ya para terminar, te puedo confiar que en una época determinada de mi vida, lamentablemente viví junto a mi pequeña la dura prueba de la separación por motivos y personas que realmente no vale la pena mencionar.

En mi caso, aún existía el amor por ambas partes así que nos decidimos a empezar de cero, borrar todo el dolor albergado en nuestros corazones, dejar a un lado el sufrimiento encarnado desde el alma y florecer juntos los dos y nuestra niña.

Florecer a una vida donde el esfuerzo constante por defender en lo que siempre hemos creído se ha convertido en nuestro estandarte de lucha.

La experiencia adquirida se incrementa y dejas de cometer muchos de los errores que te empujaron a separar a la familia.

Realmente vale la pena esforzarse, luchar por conservar la familia, darse una y mil veces oportunidades para valorarnos el uno al otro y comprender que la familia y el amor siempre que uno al otro se traten con dignidad, respeto, confianza, entrega, responsabilidad, etc.; es indispensable para que las familias florezcan y permanezcan día a día juntas, logrando así, una efectiva vacuna para la enfermedad del siglo XXI.

viernes, 4 de junio de 2010

DINÁMICA DEL SÍNDROME DE MALTRATO A LA MUJER.




El síndrome de maltrato a la mujer tiene tres fases que se repiten de forma continuada en la mayoría de las ocasiones, aunque no son de obligada aparición en todas ellas, lo cual dependerá de las circunstancias.

1.- Fase de TENSIÓN CRECIENTE.
La relación pone de manifiesto la agresividad latente frente a la mujer, que en algunos casos se manifiesta de forma específica como determinadas conductas de agresión verbal o física de carácter leve y aisladas.
La mujer va adoptando una serie de medidas para manejar dicho ambiente y adquiriendo mecanismos de defensa psicológicos. No obstante esta situación va progresando, aumentando la tensión paulatinamente.

2.- Fase de AGRESIÓN AGUDA.
Se caracteriza por una descarga incontrolada de las tensiones que se han ido construyendo durante la primera fase. La falta de control y su mayor capacidad lesiva distingue a este episodio de los pequeños incidentes agresivos ocurridos durante la primera fase.
Esta fase del ciclo es más breve que la primera y tercera fase. Las consecuencias más importantes se producen en este momento tanto en el plano físico como en el psíquico, donde continúan instaurándose un serie de alteraciones psicológicas por la situación vivida.
La mayoría de las mujeres no buscan ayuda inmediatamente después del ataque, a menos que hayan sufrido importantes lesiones que requieran asistencia médica inmediata. La reacción más frecuente es permanecer aisladas durante las primeras 24 horas tras la agresión, aunque pueden transcurrir varios días antes de buscar ayuda o ir al médico, lo cual hace que no siempre acudan a urgencias, sino que en muchas ocasiones lo hacen a consultas ordinarias, quizá para tratar de restar importancia y para evitar que identifiquen la agresión. Esta actitud se ha denominado síndrome del paso a la acción retardado.

3.- Fase de AMABILIDAD y AFECTO.
Se caracteriza por una situación de extrema amabilidad, amor y conductas cariñosas por parte del agresor, gráficamente se le denomina como fase de "luna de miel". Es una fase bien recibida por ambas partes y donde se produce la victimización completa de la mujer, ya que actúa como refuerzo positivo para el mantenimiento de la relación.
El agresor muestra su arrepentimiento y realiza promesas de no volver a llevar a cabo algo similar. Realmente piensa que va a ser capaz de controlarse y que debido a la lección que le ha dado a la mujer, nunca volverá a comportarse de manera que sea necesario agredirla de nuevo.
Durante esta fase el agresor trata de actuar sobre familiares y amigos para que convenzan a la víctima de que le perdone. Todos ellos de forma más o menos inconsciente hacen que la mujer se sienta culpable en cierto modo y que a pesar de reconocer que la agresión ha sido un acto del marido criticable, sería ella la responsable de las consecuencias de dicha agresión al romper el matrimonio y la familia si no lo perdona. Suele ser frecuente tratar de hacerle ver que el marido necesita ayuda y que no puede abandonarlo en dicha situación.
El tiempo de duración de esta fase es muy variable, aunque lo habitual es que sea inferior al de la primera fase y más largo que el de la segunda.
Creemos que con el conocimiento de las circunstancias en las que se produce la agresión a la mujer en general y el maltrato en particular, podremos enfocar el estudio médico-forense de los diferentes elementos (víctima, agresor y contexto) de forma más específica en relación a los hechos y, sobre todo, ayudaremos a la correcta solución de los casos denunciados, lo cual servirá para aumentar la confianza en el sistema y a que muchas mujeres se decidan a denunciar su situación. De este modo se irán produciendo los necesarios cambios en la sociedad para que este tipo de violencia vaya desapareciendo.