jueves, 26 de septiembre de 2013

LAS MUJERES CON MIEDO AL AMOR



veces, confiar en un hombre o dar segundas oportunidades al amor puede resultar muy difícil para una mujer que haya sufrido una desilusión o una infancia un poco traumática.
Podemos tener miedo al amor, miedo a enamorarnos y a que todo salga mal otra vez… como siempre. Pero podemos superar ese temor.

Nos han hecho daño, por lo tanto intentamos protegernos.  Tenemos miedo al amor.
El costo del amor

La verdad es que nos alejamos, no nos dejamos querer. Elegimos siempre el hombre equivocado, el que no está interesado, porque nuestro subconsciente ya sabe que la relación NO va a funcionar.
¿Casualidad o Causalidad?
No es casualidad que siempre atraigamos al mismo tipo de hombres a nuestras vidas, sino más bien causalidad. El hombre que parece preocuparse en serio por nosotras, el que de verdad va a querernos, es el que NO nos atrae.  ¿Pero por qué actuamos así?
Porque nos encontramos en una etapa de baja autoestima. El fondo del asunto es que NO nos creemos DIGNAS de ser amadas. Ésa es la causa.
¿Evitamos amar?

¿Cómo solucionarlo?
Primero necesitamos tener una buena relación con nosotras mismas:  amarnos, reconocer nuestras virtudes y aceptar nuestros defectos.  En el momento en que nosotras mismas nos amemos, seremos capaces de poder dar y recibir amor de una pareja.
No todos los hombres son iguales,
ni tampoco todas las mujeres.
Debemos amarnos, aceptarnos, independizarnos, y por encima de todas las cosas, exigir que los demás nos traten con respeto y amor.
Si un hombre no está dispuesto a darte lo que buscas, no hay ninguna necesidad de seguir viéndolo.
No desesperes por una causa perdida… hay un millón de hombres dispuestos a amar.  ¡Tú mereces ser amada!

miércoles, 11 de septiembre de 2013

DEBEMOS REACCIONAR A TIEMPO





La vida está llena de dificultades, decisiones incómodas que debemos tomar, escollos, conflictos e inconvenientes…
Es necesario saber reaccionar a tiempo, saber identificar esos obstáculos y realizar cambios y decisiones antes de que sea demasiado tarde.
Las decisiones hay que tomarlas antes de que los pequeños problemas se hagan grandes.
Gran parte de nuestra vida está basada en decisiones, que pueden ser tanto temporales como para toda la vida. A todos nos ha pasado que hemos reaccionado tarde ante una decisión, ocasiones en las que sin darnos cuenta nos involucramos en decisiones equivocadas, dejándonos llevar por la emoción del momento… y los resultados son muchas veces negativos y nos preguntamos cómo o porqué fue que hicimos eso.
Cuando se trata de tomar decisiones, las debemos analizar cuidadosamente; pero muy pocas veces nos tomamos el tiempo necesario para ello, ¿por qué somos así?, ¿por qué reaccionamos tarde? Es increíble las veces que nos va mal porque damos por sentado que todo va a salir bien, sabemos en teoría, que tenemos que hacer y cómo debemos hacerlo, sin embargo por alguna extraña razón la mayoría de veces reaccionamos tarde o simplemente no reaccionamos y cuando venimos a darnos cuenta pueda que todo esté en contra o hasta perdido.
¡Decidir agobia!
Enfréntate a tus problemas  y toma decisiones antes de que sea tarde:
Muchas personas no le dieron la atención necesaria a su relación o matrimonio y no lo quisieron hacer hasta que recibieron la demanda de divorcio, o cuando se dio la separación. Perdieron en su momento a quien era “el amor de su vida” porque simplemente reaccionaron tarde, pensando que siempre estaría allí, dando malos tratos o comportándote como quisiste sin pensar que un día se iba a cansar e iba a dejar de amarte y ahora que ya no está que ya no regresa, reaccionas tarde y ya no puedes recuperar lo que antes tuviste con esa persona.
A lo mejor lo tomaste como un juego, apostaste con tus sentimientos y sin notarlo la diversión se te hizo un vicio lo que te llevo a perder tu estabilidad y la de tu familia, y al reaccionar te preguntas: ¿Cómo fue que llegue a este punto?
Pensamos muchas veces que somos indispensables en un empleo y no ponemos todo de nuestra parte creyendo que no podríamos ser despedidos, un día de tantos nos despiden, porque sin darnos cuenta adoptamos una actitud que muy bien la pudimos haber cambiado, pero es tarde para ello.
¿Por qué casi siempre reaccionamos tarde?
Cuánto dolor y sufrimiento nos podríamos evitar si tan sólo aprendiésemos a ser más tolerantes, pacientes y sobre todo poner atención a la voz de la razón y la lógica.
Muchas veces se piensa que es buena idea seguir y escuchar al corazón y no reaccionamos en el momento oportuno para no lamentarnos por las consecuencias de un momento de inconsciencia que ya no se puede cambiar.
Una mala decisión nos hace llegar a situaciones que no queremos, en los que se pierde el control y caemos. Nada puede asegurarnos que todo volverá a la normalidad, o a ser como era antes, pero sí que podemos recuperar la confianza en nosotras mismas, con el propósito firme de no olvidar las lecciones de una decisión equivocada. Antes de aventurarte pensando que saldrás bien librada de todo, piensa en las lágrimas, los sufrimientos propios y los de las personas que amas y trata de REACCIONAR A TIEMPO, los errores, las malas decisiones, o la mala forma de ver las cosas, pueden ser evitados en el futuro, no tropecemos con la misma piedra.
Muchos de los momentos más duros en la vida son provocados por nosotras mismas. Hoy es un buen momento para reaccionar positivamente, para rectificar antes que se nos haga tarde y perder lo que con tanto esfuerzo se ha logrado.